Espacios de acogida
Abelardo Alfonso Ontiveros
La ciudad de Granada es una ciudad de tipo medio que cuenta con un importante anillo metropolitano, que junto a la afluencia del turismo, provocan una aplastante presión sobre el centro histórico. Como cualquier otra ciudad histórica, Granada, presenta dificultades en cuanto a movilidad a causa de la incapacidad de dar respuesta a las necesidades del siglo XXI en el que el coche tiene un papel fundamental en nuestro estilo de vida. Además, nuestra ciudad presenta el agravante de las condiciones topográficas que pueden llevar a dificultar la implantación de un modelo de transporte ecológico y poco invasivo como puede ser la bicicleta.
Esta situación, que se materializa con la pérdida de comercios tradicionales en los barrios, un despoblamiento del centro, dificultad de estacionamiento… nos está llevando a un modelo de ciudad en el que el centro queda colapsado de vehículos y cuya actividad está principalmente enfocada a satisfacer las necesidades del turismo o actividades terciarias, perdiendo así la esencia cultural y ciudadana de las calles y plazas, que quedan relegadas a meros elementos para el tránsito.
Si bien es cierto que se están tomando medidas al respecto, como por ejemplo, el Plan Estratégico de Granada (EG2020) cuyo lema es “Haciendo humano lo urbano” o la reciente inaugurada línea de metro, que pretende descongestionar la ciudad trabajando con el área metropolitana, resultan insuficientes. Granada precisa de liberar aún más sus calles para que vuelvan a ser vividas por los ciudadanos, volviendo a poner de manifiesto los valores inmateriales de esta ciudad. Para ello se debe de trabajar no sólo en un plan de movilidad, sino que además habrá que tomar iniciativas políticas que promuevan, por ejemplo, el retorno de habitantes al centro. Como medida concreta, propongo la creación de espacios de acogida de vehículos en el entorno de la ciudad, pero a la vez, próximos al centro. En definitiva será crear zonas de aparcamiento público en el entorno de Granada. Esta medida ya se ha implantado en el Mont-Saint-Michel en la Bretaña Francesa y en la Cartuja de Sevilla. También en Granada, entorno al año 2000, se elaboró el Plan de Gestión del Patronato de la Alhambra y Generalife que sacó los vehículos del Bosque de Gomérez y del entorno próximo de la Alhambra creando una zona alternativa de aparcamientos.
Un espacio de acogida de vehículos se puede ubicar en la zona de la rotonda de Neptuno, usando los terrenos junto a la circunvalación que carecen de interés agrícola. Será el inicio de una ruta verde y arbolada por la calle Recogidas que servirá como unión entre el centro y la zona de aparcamiento, estableciendo a la vez, la conexión y relación histórica que Granada ha tenido con la vega y que está poco presente en la actualidad. Además, las condiciones topográficas de la zona, favorecen la implantación de un sistema de intercambio modal en el que la bicicleta juegue un papel importante. Con esta medida podremos conseguir reubicar los vehículos, que no significa eliminar aparcamientos puesto que hoy en día la realidad es que el transporte público no satisface las necesidades de todos. Así, obtendremos espacio libre en el interior de la ciudad para poder hacer aceras más anchas, semipeatonalización de calles, bulevares…que inviten a vivir las calles, mejorar la calidad del aire y eliminar ruidos.
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