Pequeños espacios que unidos hagan un gran espacio verde
Según Enriq Pol, catedrático de Psicología Ambiental de la UAB los espacios verdes en una ciudad regulan la temperatura y la humedad, producen oxígeno y filtran radiación, absorben los contaminantes y amortiguan los ruidos y por supuesto favorecen el bienestar y la calidad de vida de las personas. En Granada asistimos en los últimos años a una extraña subida de las temperaturas (dando las máximas de España) que coincide, en mi opinión, además con un cambio climático, con la mala urbanización de la ciudad en los últimas décadas, con grandes avenidas de asfalto sin sombras, con plazas llenas de hormigón y sin practicamente ningún elemento natural, que unido al abuso de medios de transporte y de sistemas de refrigeración convierte esta en un horno que, si no lo remediamos, irá a más en las próximas décadas. Por este motivo una de las medidas que propongo es, obviamente ,el aumento de zonas verdes en Granada. La pequeña novedad es que este aumento de zonas verdes no consistiría solo en construcciones de parques más o menos grandes en las periferias de la ciudad (que por supuesto serían bien acogidas también, sobre todo esa construcción de un gran espacio verde en los terrenos de Renfe que tanto demanda la ciudadanía) si no en la conversión del centro en un gran espacio verde gracias a la unión de pequeñas plazas y espacios en los que el arbolado tuvieran mayor presencia. Para llevar a cabo esta iniciativa habría que aprovechar esos solares que hay por el centro de antiguas casas y antes de convertirlos en nuevas grises viviendas hacer pequeñas plazas que unidas mejoren la masa verde de Granada. Junto a esta medida habría que replantearse la construcción en los últimos años de diversas plazas en Granada donde lo único que predomina es el hormigón y la piedra. Cito solo algunos lugares a modo de ejemplo: la Plaza de San Lázaro (la que hay junto al horrendo edificio de San Lázaro),la plaza Ciudad de los Cármenes, la plaza de San Juan de Letrán, la plaza que hay junto al pasaje de las siervas, la propia plaza de La Caleta… y tan solo estoy citando unos cuantos ejemplos. Habría que replantear como han sido construidos esos espacios y en qué estamos convirtiendo Granada, hacer un estudio para plantar árboles locales, que no requieran un mantenimiento tan alto como otros más exóticos e incluso plantar arbustos mediterráneos que requieran poco cuidado (lavanda, jara, tomillo). Esta medida evidentemente es compleja y supone un esfuerzo económico grande por parte del consistorio al cual, imagino, le costaría no sacar rédito a solares que podrían ser construidos urbanísticamente y convertirlos y tendría que estudiar el mantenimiento de dichos espacios verdes pero como cualquier gran proyecto es un proyecto que habría que hacer poco a poco en un largo periodo de tiempo, construyendo granito a granito la Granada verde del futuro, siguiendo el modelo de ciudades como Vitoria rodeada de un gran anillo verde y con numerosos espacios dentro de la ciudad (en la foto incluyo plano de la ciudad de Vitoria).
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