Más pensamiento crítico en la universidad: saber leer, saber pensar, saber ser.
Olivia Ávila Ruiz
Necesitamos más pensamiento crítico en las aulas y más cursos que ofrezcan a los alumnos una visión global del hombre en el mundo más allá de la fragmentación del conocimiento a que conduce la especialización propia de cada Grado. Puesto que en el origen y en la esencia de la universidad siempre ha estado presente la unidad de los distintos saberes y disciplinas en una visión universal de la vida y del hombre en el mundo, y puesto que actualmente se ha perdido la formación universal del alumno (que es el fundamento del ser humano), es necesario hacer una pequeña aportación. Universidad significa saber universal. Pero ya no hay nada de esto en la formación que impartimos, sino saberes fragmentados e inconexos.
La propuesta pretende que haya muchísimos más cursos que pongan el foco en algo más importante que los conocimientos propios del grado: la filosofía y el pensamiento crítico. ¿Acaso la formación académica ha de reducirse a encontrar un trabajo y vivir sin plantearse nada ni actuar para mejorar las cosas? Actualmente, solamente hay un curso de este calibre: Grandes obras de la humanidad, del CEMED, e impartido por Gabriel García Noblejas:
https://canal.ugr.es/convocatoria/curso-las-grandes-obras-la-humanidad-modulo-1/
Los alumnos deben ser capaces de reflexionar, de pensar de una manera individual y crítica. Mi propuesta consiste en hacer de cursos similares al anterior una realidad, implementarlos en la guía didáctica o premiar a los alumnos que asistan a los mismos. Por otra parte, para que ese conocimiento/sabiduría no quede en agua de borrajas, propongo realizar eventos, congresos o talleres anuales para que los alumnos puedan comentar sus reflexiones críticas acerca de temas sociales y encontrar vías para que puedan encontrar soluciones. Hay alumnos con inquietudes en materia de medioambiente o feminismo; otros que se dan cuenta de que vivimos para consumir; otros que saben que en su habla normal utilizan palabras hirientes y/o que están llenas de prejuicios; otros que sí son conscientes de ello pero no encuentran herramientas para hacer reflexionar a los demás ,etc. ¡Demos voz y al potencial universitario! Para ello, los docentes tienen que conocer esta propuesta y asumir el compromiso de implementarla en sus clases. A veces simplemente basta con dedicar algo de tiempo a esto… tiempo que por cierto escasea en toda la comunidad universitaria debido a la sobrecarga de tareas tanto de profesores como de alumnos. ¿No es hora de cambiar esto también?
Las ideas buenas no son escasas en la universidad, pero el problema está en que no todos saben cómo llevarlas a cabo. Explotemos el talento universitario y fomentemos mucho más el pensamiento crítico. Es una cuestión de voluntad, sensibilidad y compromiso.
Gracias.
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