Unificar o remodelar la fachada del antiguo Banco de Santander
El, con permiso, espeluznante edificio del Banco de Santander, en un lugar tan estratégico como es la unión de los barrios del Albaicín, del Realejo y del Centro, es un error urbanístico de primer orden que debería ser solucionado con la remodelación de la parte alta del edificio o bien con la unificación de la portada, es decir todo con cristales.
Parece injusto que una calle como la Gran Vía, donde se dan cita tan bellos ejemplares de construcciones modernistas acabe en un edificio tan horrible como lo es el del Banco de Santander. Mi propuesta es o bien unificar su fachada completando la parte alta del edificio a imagen y semejanza de la baja, es decir con los espejos que reflejan la estatua de Isabel la Católica o bien remodelando integramente la parte alta suprimiendo ese diseño más propio de un apartamento de la playa que de un punto neurálgico de la ciudad turística como lo es este.
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